Desde muy pequeño tuve la curiosidad de entender por qué repetía determinadas actitudes que no me gustaban. Me preguntaba: ¿seré masoquista? Curiosamente, este fin de semana en un evento de verano estaba observando y volví a constatar que somos animales de hábitos. Cumplimos rituales, formas de estar y actuar, porque así aprendimos, y muchas veces son armaduras para esconder nuestro verdadero «Yo», es nuestro Ego que nos trata de defender de algo que puede ser «peligroso» para nuestra integridad.
Reconocer
Si no reconocemos un comportamiento que no nos gusta, no podemos ser conscientes de ese mismo comportamiento. Cerca del 95% de nuestros comportamientos son programas automáticos que no son conscientes. Al reconocerlo, tomamos 100% consciencia que existen y que están ahí. Ya no nos escondemos.
El paso de reconocer es identificar cada día quién estás siendo, lo que realmente eres. Solo cuando te das cuenta de quién eres, puedes ser consciente de lo que quieres seguir siendo y de lo que quieres cambiar.
Y para reconocer, tienes que estar en quietud, relajado, estar en el momento presente, olvidar todo tu exterior para poder traer a tu consciente realmente lo que estás viviendo con tus programas subconscientes.
Este es solo el primer paso, pero es fundamental. Con él, abres una nueva dimensión de tu Ser.
¿Quieres seguir siendo el mismo? o ¿quieres cambiar patrones que te hacen daño y te limitan?