Cantinflear – Hablar o actuar de forma disparatada e incongruente y sin decir nada con sustancia (Real Academia de la Lengua Española)
No tenia ni idea que esta palabra existía en la RAE, la real academia de la lengua española. Me he quedado alegremente sorprendido.
Para mi es un homenaje, al hombre, al artista, al humanista, al humorista y al actor que interpretaba la vida de alguien que siempre estaba en favor de los derechos de los que menos tenían o sabían. A este gran embajador de México.
Cantinflas (Mario Moreno) ha nacido en un entorno muy pobre y desde muy joven ha abrazado muchas profesiones, ha experimentado muchas opciones.
Esto lo ha llevado a interpretar muchos personajes en las muchas películas que he hecho, personajes que el mismo ha vivido en su vida fuera de los escenarios.
Más allá de una forma de estar, de una interpretación o de su carácter humanista, mi admiración por ese cantinflear siempre ha sido inmensa, me encantan sus películas.
En ese decir todo sin decir nada, en esas palabras confusas que aclaran y confunden.
Es como un juego con la misma mente, con la confusión mental que nos surge constantemente.
En ese juego de palabras, en ese cambio constante y uso de palabras sueltas, es como una locura controlada, un juego sin lógica que saca a todos de su razón.
De un formato conocido, de una lógica aprendida.
El Cantifliar no es solo un juego de palabras pero también una reto a nuestra forma de estructurar la verdad en las mismas palabras.
Eso es lo que me encantaba, además de su humor muy transversal y casi imperceptible con los gestos, las miradas y expresiones.
Sus demostraciones de ignorancia retaban siempre a las mentes intelectuales, conocedoras, porque lo que más provoca un conocedor profesional es un ignorante.
Aunque lo más sabio lo veo en la ignorancia del asumido como verdad y la apretura a lo que parece que siempre es fresco y nuevo.
Ese Cantinflas me ha ensenado desde pequeño a verlo siempre con esa sonrisa. En esa ignorancia típica de un niño que apenas está interesado en descobrir.
Esa ignorancia tan perseguida por la sociedad como que se de un crimen se tratara, por vivir en esta vida como se fuera la primera ves.
y como diría el: ¿Cómo dice que me dijo que dijo?, ¡A sus órdenes jefe!
